La Punta : panorama electoral

Durante los meses que llevo trabajando en mi campaña política con miras a las próxima elecciones municipales, debo reconocer que he acumulado una importante experiencia gracias a mi permanente interacción con los vecinos y los diferentes gremios punteños asimilando su sentir y su problemática

y en este trajinar grata ha sido mi sorpresa, sin duda, el hecho que muchos punteños vean con sumo agrado el liderazgo de una mujer en la próxima contienda electoral. Me satisface y agradezco que reconozcan en mi participación un gesto de valentía e inclusive que las mujeres manifiesten sentirse muy orgullosas de ser representadas por mi persona. Eso lo valoro mucho y me anima a seguir esforzándome cada día más. Los hombres, por su parte, opinan que una mujer en la alcaldía genera mayor confianza en cuanto a honradez, mayor empatía para relacionarse y dialogar con los vecinos y mejor capacidad organizacional y efectivamente, no les falta razón, así somos las mujeres por naturaleza y por condición. Es muy satisfactorio también , constatar que se valora mi trayectoria en la política a través de mi participación y apoyo a diferentes colectivos sociales y de mi producción intelectual plasmada en diferentes publicaciones.

Sin embargo, a pesar de esa buena aceptación que he podido percibir mientras aplicaba encuestas a un grupo representativo de vecinos para elaborar el diagnóstico del distrito, en las innumerables conversaciones y últimamente, durante la entrega de mi folletos de presentación personal-política; tengo que reconocer que estoy transitando por un camino complicado. Por un lado, estará Chimpum, siempre mutando y metamorfoseándose detrás de nuevos nombres y rostros para mantenerse en el poder. Se me informó, que en un sondeo de opinión elaborado hace unos meses en La Punta, el representante por Chimpum, obtuvo un bajísimo respaldo, sin embargo, Chimpum, es Chimpum y tenemos que estar atento a nuevas maniobras por recuperar este distrito.

Por otro lado, también es evidente la tendencia a lo que yo llamo, voto mesiánico. Es decir, un voto por un personaje, casi un héroe en el imaginario vecinal, que regresa del pasado para solucionar todos los problemas del distrito y es capaz de regresionar la realidad de la Punta a lo que fue hace 15 años. Esta percepción, por cierto, es peligrosa y engañosa porque el pasado nunca vuelve tal y como fue. Alimentar esta expectativa o permitir que exista, no es ético. las condiciones sociales, políticas y económicas, son otras. La población, tampoco es la misma y los recursos económicos, menos.En tiempos relativamente recientes, hemos tenido alcaldes que han tenido la oportunidad de reelegirse y en lo personal creo que ya tuvieron la ocasión de colaborar con nuestro distrito y mostrar también sus límites en lo que concierne a gestión municipal.

Es muy cierto que el voto es emocional y un 40 % de electores deciden su voto en las últimas semanas, aún así es importante que los candidatos desde ya vayan informando los diferentes aspectos de sus planes de gobierno para fomentar el intercambio de ideas y el diálogo alturado con los vecinos y entre los vecinos. Hacer ésto es parte del perfil de un candidato serio y responsable. No elegir correctamente es una consecuencia   de la deficiente educación cívica y la escasa cultura política que limita a los electores a emitir un voto certero. Las personas no se informan lo suficiente, tienen poco interés y desconfían en general de los políticos, por ello hacer docencia en este campo es necesario por parte de quienes aspiren ocupar el sillón municipal. Hagamos de la Punta un distrito modelo empezando por esta tarea y desarrollando campañas limpias donde los vecinos sean los que ganen.

Sin embargo, hoy en día, a pesar de estas limitaciones, se fiscaliza más a los candidatos y es indudable que en La Punta se reclama un cambio y nuevos rostros. Se busca un candidato o candidata honrado, honesto, empático y capaz de cumplir sus promesas electorales: Esto me ha quedado muy claro, aunque lastimosamente, también se percibe un cierto porcentaje de un electorado interesado en apoyar al candidato que responde a sus intereses personales para lo cual no escatima inclusive justificar posibles actos de corrupción o desaciertos de gestión..

Queda aún un buen tramo por recorrer para las próximas elecciones y nuevas opciones irán apareciendo. Algunos, tal vez muy confiados, harán su aparición a última hora. Sin embargo yo, seguiré trabajando, visitando casa por casa, dialogando con el mayor número de vecinos posible para lograr un Plan de Gobierno consensuado, serio, creíble y factible que conlleve al bienestar de La Punta. La campaña yo la entiendo como un trabajo conjunto de quienes pretenden dirigir los destinos de la ciudad y su población. Sólo esa conjunción de conocimientos, esfuerzos, aportes y voluntades nos conducirán al éxito como comunidad humana.