El Presidente del Bicentenario: ¿ Cómo elegir correctamente ?

Estamos a menos de dos meses de las elecciones para elegir a un nuevo Presidente de la República, sin embargo, las encuestas reflejan casi un 50 % de electores que votarían por nulo o viciado. Ésto es muy preocupante porque denota un enorme descontento de la población respecto a los candidatos presidenciales y no es para menos considerando la actuación de nuestros gobernantes en las últimas décadas hasta el presente, inclusive. Los ciudadanos han perdido la confianza en los Partidos Políticos, en los políticos y en las Instituciones. Sin embargo, tenemos que elegir a alguien, por lo tanto vale la pena ensayar algunas ideas que nos ayuden a escoger bien. Aunque insisto, son los Partidos políticos los que nos deben ofrecer a sus mejores cuadros y no tengamos que seguir votando por el mal menor.

Un buen punto para empezar es tomarnos un tiempo para leer algunos estudios recientes que nos muestren un análisis situacional del Perú y una proyección de su economía en los próximos tres o cuatro años. Ello nos ayudará a dilucidar si los ofrecimientos de campaña son factibles de realizarse o son simples enunciados populistas. No olvidemos que, respetados economistas, consideran que para que la economía peruana se recupere a los niveles en que se encontraba antes de la pandemia, tendrán que pasar por lo menos unos tres años, tal vez más, dependiendo de la evolución de la Covid 19, de la eficacia de las medidas para la reactivación económica y por supuesto del riesgo político, es decir, posibles enfrentamientos entre el poder Ejecutivo y el Legislativo.  Eso significa que nuestro próximo Presidente no tendría mayor capacidad de lograr resultados importantes a corto plazo y más bien tendría que dedicarse a resolver los temas urgentes en Salud, sentar las bases para solucionar la complicada situación económica y establecer la reforma del Estado.

Por lo antes expuesto, me temo que en lo económico, la mayor parte de las propuestas o tal vez todas, tienen un sesgo populista, poco serio y profesional. Tenemos candidatos, que lejos de reducir el tamaño del Estado, pretender crear nuevos Ministerios, como el de Infratutura, perdón, Infraestructura (tenemos el Ceplan y Proinversión); tenemos también quienes ofrecer dar nuevos bonos elevando al doble el monto actual (¿en un Estado con déficit financiero ?) ; también tenemos candidatos que relacionan sus capacidades con sus creencias religiosas (nuestro Estado es laico) y también tenemos los que ofrecen lucha frontal contra la corrupción (sin embargo tienen proceso por lavado de activos ) y así, muchas perlas más...¿ complicado panorama, no ?

Bueno, ésto es lo que hay. Ensayemos ahora el perfil que debe tener nuestro nuevo Presidente. Revisando algunas encuestas algo pasadas, las personas opinaban mayoritariamente que el mejor candidato debería ser profesional, considerando casi un 40 % que debería ser Economista, cosa que no debería llamar la atención dada la complicada situación de nuestra economía. Luego venía Abogados, Administradores, Empresarios, Sociólogos, etc, con porcentajes muy pequeños. Sin embargo, últimos sondeos revelan que los votantes consideran que un buen candidato, merecedor de ser elegido, debe tener un buen bagaje cultural (nos representa internacionalmente) pero,  más importante que tener una profesión,  son sus habilidades blandas, es decir, su forma de ser, su capacidad de relacionarse con los demás (empatía), su capacidad de liderazgo, su visión estratégica y su buena comunicación. A ésto añaden, su formación en valores y que no esté contaminado ni siquiera con sospechas de corrupción. Entonces, se quiere una persona transparente, pragmática, un "hacedor", que inspire confianza.

Se dice que el primer acto de corrupción es aceptar un cargo para el cual no se está preparado. ¿Tenemos realmente 24 candidatos a la Presidencia de la República (para el Congreso, mejor no intento responderme, aunque por supuesto hay excepciones honorables)) en capacidad de asumir tan grande responsabilidad ? Investiguen, analicen y comparen. No basta con exponer Planes de Gobierno. Lo que deben demostrar los candidatos es el "Cómo" lo harán. De lo contrario, siempre nos volverán a engañar