Costa Verde chalaca: crónica de una muerte anunciada
" La próxima Costa Verde chalaca será un emporio turístico: habrán edificios, hoteles, casinos, jardines y lugares de esparcimiento " . Así vendió esta obra el entonces gobernador del Callao, Félix Moreno, hoy preso y a quien se le atribuye haber recibido una coima por el contrato con la empresa Odebrecht por la ejecución de dicha obra.
Hoy los chalacos vemos con indignación cómo una obra recientemente inaugurada adolece de una serie de fallas garrafales imperdonables, dado que existían los recursos y la tecnología necesaria para preverlos. Sin embargo, en noviembre pasado se inauguró el primer tramo con sumo apuro y este año se entregó la obra hasta Chucuito, sin la debida iluminación e inclusive sin el retiro de la basura y desmonte adyacente a la vía.
El diseño original de la Costa Verde consistió en una autopista adyacente a un gran malecón que conectara los distritos limeños con el Callao descongestionando además, el tráfico de la ciudad. Su función era conectar la ciudad a nuevas playas y lugares de esparcimiento y recreación, prohibiéndose inclusive construcciones que impidan el disfrute del paisaje marino. Para ello debía ganarse terreno al mar e implementarse espigones perpendiculares a la costa, necesarios para aminorar la braveza del mar y además, generar playa.
Lamentablemente, la falta de autoridad de la entidad responsable del planeamiento de la Costa Verde dio lugar a que los alcaldes ejecutaran diversas obras a su criterio sin seguir un patrón adecuado y más bien con un sentido clientelista, permitiéndose inclusive, la construcción de diversos restaurantes que rompen el paisaje natural. Así la añorada Costa Verde se fue convirtiendo en una vía expresa que priorizó el uso del automóvil antes que las necesidades del peatón, amén de un mal aprovechamiento de los nuevos espacios públicos ganados al mar.
Sin embargo, el caso del Callao es patético. El diseño original de la obra comprendía ciclovías, tres hectáreas para zonas de esparcimiento con áreas verdes, cuatro puentes peatonales, malecón y 65 espigones perpendiculares a la costa. Ahora, estimados lectores, ustedes pueden juzgar cuánto de ello se hizo ya que la obra ha sido recientemente inaugurada, aunque sin iluminación de tal modo que usarla por la noches es una ruleta rusa por la gran inseguridad de la vía debido a las personas de mal vivir que habitan en las zonas aledañas. Prueba de ello son las constantes agresiones a vehículos que transitan principalmente en sentido de sur a norte.
Ahora, a la inseguridad mencionada en el párrafo anterior, hay que agregarle el peligro que representa la braveza del mar ya que no se construyó ni un sólo espigón y más bien se construyó un muro bajo al que se adosó un enrocamiento que probado está, no sirven para contener la fuerza de los oleajes a decir por los expertos y que lo hemos podido comprobar esta semana. Un oleaje anómalo de baja a regular intensidad ha sido suficiente para que el mar ingrese a la pista arrojando peligrosas piedras en la vía de norte a sur. Esta modificación en el diseño original, habría obedecido al interés de bajar costos condenando a la Costa Verde chalaca a una muerte prematura, sea por la inclemencia del mar o por caer en desuso por su alta peligrosidad por los constantes ataques a los conductores con intención de robarles obviamente.
Lo ideal hubiera sido la reubicación de los asentamientos considerados altamente peligrosos ubicados al lado de la vía pero ya que esto no se hizo, hoy en día los usuarios demandan que se construya un muro alto que impida que gente de mal vivir atente contra los conductores y por supuesto que se construyan los espigones proyectados en el diseño original de la obra. Los chalacos no nos merecemos que se nos entregue una obra sin los debidos estándares de calidad, ornato y limpieza ya que es lamentable, además de lo anteriormente dicho, ver la presencia de basura arrojada por ciudadanos irresponsables al lado de la vía. En caso de no hacerse las correcciones necesarias, la Costa Verde del Callao sería un fracaso más, prueba de la ineficiencia de sus autoridades y del mal manejo del dinero publico. Las nuevas autoridades nos ofrecieron el verdadero cambio...lo estamos esperando pues.
Julia Schabauer
Las autoridades solo hacen las cosas para cumplir, en mi barrio de Bellavista muchas canchitas de fulbito y juegos para niños en pésimas condiciones necesitan mantenimiento urgente
ResponderEliminarAsí es ...se inauguran y luego se abandonan.
EliminarLa PURA VERDAD.
ResponderEliminarLamentablemente, sí.
EliminarCIERTO
ResponderEliminarLO RARO ES QUE NADIE DICE NADA
ResponderEliminarBueno, yo estoy diciendo 😉
EliminarMuy buen análisis de la realidad del Callao muy cierta las actuales autoridades coludidos con los delincuentes
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