¿ Sabes que en el Callao tenemos un "Caral chalaco ?

 Caral es , sin duda, un orgullo para los peruanos. Este sitio arqueológico, que forma parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO, representa el inicio de la civilización en la zona central andina, con una antiguedad de 5,000 años a.p.  Antes de ella, el valle de Supe estuvo habitado por grupos familiares dispersos. Su conocimiento e importancia han superado el ámbito nacional, lográndose posicionar como un importante atractivo para el turismo nacional e internacional.

Caral corresponde a una sociedad jerarquizada, con diferentes clases sociales, en las que los agricultores y pescadores pertenecían a los estratos más bajos. Las investigaciones de restos de individuos dedicados a ambas actividades económicas, han revelado malas condiciones de nutrición, seguramente debido a su bajo estatus. Sin embargo, tanto la pesca y la agricultura constituyeron la base económica de esta civilización a lo que se sumó el intercambio de productos y conocimientos con comunidades establecidas en diferentes pisos altitudinales. Este intercambio de aprendizajes, resultantes de sus distintos procesos de adaptación a sus ambientes, fue lo que sentó las bases de esta civilización primigenia.

Caral cubría una extensión de 400 Kms. de norte a sur y, de 300 Kms. de este a oeste, en lo que se conoce actualmente como "El norte chico". Integró diferentes valles desde Santa hasta el Chillón en el Callao, incluso, hasta Lurín. En este punto, cabe destacar que las relaciones entre las diferentes comunidades que integraron esta civilización, se desarrollaron de manera pacífica ya que en el proceso de las excavaciones arqueológicas, no se han hallado armas de ningún tipo.

En Caral se evidencia la creación de importantes tecnologías para su supervivencia y organización del gobierno. Así tenemos la existencia de canales para la agricultura, el uso de shicras (bolsas de fibra vegetal rellenas de piedras) como sistema antisísmico y la utilización de quipus para plasmar toda la información que sirviera para administrar su territorio y controlar su población. Estos quipus fueron utilizados, miles de años después, en el Tawantinsuyo.

Toda esta acumulación de sabiduría hace de Caral un símbolo de la grandeza de los antiguos peruanos. Sin embargo, tú chalaco, ¿ Sabes que en nuestra provincia tenemos también un lugar al que denomino nuestro "Caral chalaco" ?

Se trata de un importante yacimiento arqueológico denominado Huaca Rosada o Pampa de los Perros, situado en la margen izquierda del río Chillón, en el distrito de Ventanilla. Este lugar, perteneciente a la Tradición Caral por sus características arquitectónicas (pirámides aterrazadas y plazas circulares hundidas), tiene una antiguedad datada en 4,500 años a.p. y una extensión aproximada de 57,348 metros cuadrados. Al igual que Caral, corresponde a una etapa precerámica, es decir no se utilizó la cerámica con fines domésticos sino más bien se usaron las cáscaras de calabazas para sus alimentos.

Este importante lugar, no ha sido lo suficientemente valorado en lo que respecta a su recuperación y puesta en valor para el turismo en el Callao. Aprovecho en decir, no basta que una autoridad declare el Callao como destino turístico, sino interviene adecuadamente su potencial cultural. Este es el caso de Huaca Rosada, que a pesar de constituir un importante hito en la historia prehispánica de la costa central, no se le aprovecha adecuadamente.

Huaca Rosada tiene un potencial turístico importante por su compleja y variada arquitectura, así como por su antiguedad. La información científica que se podría recuperar tendría un importante impacto en el turismo y por ende, en la calidad de vida de sus vecinos. Huaca Rosada podría muy bien convertirse en una interesante atracción turística para el distrito de Ventanilla que además contribuiría a mejorar su imagen como el distrito chalaco con mayor número de sitios arqueológicos.

En Huaca Rosada se podría muy bien replicar la fórmula utilizada en Caral para involucrar a la población aledaña en el cuidado y protección del lugar además de contribuir con la lucha contra la pobreza a través de capacitaciones en diferentes aspectos tales como talleres de elaboración de modelado en arcilla con técnicas ancestrales, estampados de diseños propios del lugar, etc,  además de la instalación de diferentes servicios turísticos como restaurantes, ventas de souvenirs hechos por los lugareños, guías del lugar, transporte y otros.

Hay mucho por hacer en el Callao en el tema patrimonial y su aprovechamiento en el turismo, tema que pasa necesariamente por la voluntad política de nuestras autoridades. Aún estamos a tiempo, antes que las invasiones y los traficantes de terreno terminen destruyendo patrimonio que pertenecen a todos los chalacos y a nuestras futuras generaciones para que sepamos y valoremos de dónde venimos.

JULIA SCHABAUER