La administración pública de el Perú: ¿ Están los candidatos preparados para este reto ?

 Conforme avanzo en mis estudios de Gestión y Administración Pública, me queda, cada vez más claro, el enorme monstruo en que se ha convertido el Estado, el gran retraso que lleva la modernización de la gestión pública en el Perú en relación a los países desarrollados y la absurda pérdida de ingentes cantidades de recursos en el sostenimiento de un Estado elefantiásico.

Con el crecimiento de las ciudades, crecen también las demandas al Estado por lo cual éste debe de reajustar sus estrategias de respuesta en función del ciudadano. En este sentido, las propuestas de la mayor parte de los candidatos, hasta el momento, son sumamente pobres y/o nulas, limitándose a formas obsoletas y facilistas de hacer política a través de dádivas y la repetición constante de las famosas frases que prometen un cambio...el cual por cierto, nunca llega...No hay un discurso profesional ni técnico.

En el Perú, las respuestas del Estado a estas demandas, ha sido el crecimiento desmedido de un Estado burocratizado el cual, sólo recientemente, a partir del 2013, está trabajando en su modernización, reemplazando los viejos principios de la administración pública por los paradigmas de un Estado gerencial o empresarial y por la Gobernanza pública en la que se empodera al ciudadano haciéndolo partícipe de la gestión de gobierno, básicamente, a partir de la Ley de Transparencia y la elaboración del Presupuesto participativo. Si bien los avances son lentos aún, no dejan de ser importantes.

Los candidatos deben ser conscientes de esto último y entender que la visión moderna de gestión reemplaza al alcalde que llegaba con su Plan de Gobierno bajo el brazo, asumiendo su rol de una manera jerárquica, por un facilitador que articula las necesidades de su población con la ejecución de las políticas necesarias con previo acuerdo con su comunidad..

Asimismo, los candidatos deben de tener muy en cuenta que hoy en día los ciudadanos están cada vez más involucrados en la fiscalización de la gestión, principalmente por los niveles alarmantes a los que ha llegado la corrupción en el Perú. Igualmente, exigen que sus impuestos se vean reflejados en obras y servicios que resuelvan sus problemas y necesidades. El Estado, en sus diferentes niveles de gobierno, debe DEVOLVER LOS IMPUESTOS A LOS CIUDADANOS A TRAVÉS DE LOS SERVICIOS PÚBLICOS.

Para ello, el cambio fundamental está en cambiar un sistema de gobierno que sólo mira hacia adentro de las instituciones, es decir su funcionamiento, por un modelo que mire hacia fuera, es decir, a sus efectos en la sociedad.

Lamentablemente, esa forma de "mirar hacia adentro" ha hecho que las instituciones de gobierno midan su eficiencia en la medida que se cumplan las normas, llenándose de personal donde muchas veces dos personas realizan la misma función derrochándose así inútilmente recursos que bien podrían ser invertidos en asuntos más provechosos. Así, este crecimiento desmedido de personal en el Estado, pasa muchas veces por el pago de favores políticos, sobretodo en tiempos de campaña.

Espero leer o escuchar próximamente entre los candidatos, propuestas claras respecto a estos temas, de tal manera que se generen cambios positivos en favor de los electores.